A Sergio Iván,
que siente luz de vocación en su horizonte
en su cumpleaños
Tienes hoy, ya veinte años.
Cuarta parte de la vida.
No es poco. Tampoco mucho.
Es la alborada del día.
¡Muchas horas por delante
te quedan para vivirlas!
Mañanas de sombras nuevas,
aplomados mediodías;
atardeceres que mueren
al suave toque de vísperas.
Muchos otoños e inviernos
–fríos en el alma fría–
primaveras y veranos
de esperanzas redivivas.
¡Cuánto te queda de andar
hacia esa luz que te brilla!
Mas no cejes ni te canses
muchacho, que así es la vida.
Alfredo Rubio de Castarlenas