Soneto con estrambote gozoso
Con motivo del 17 de abril de 1985
Déjame Juan Miguel que te rescate
que para empeños nuevos te preciso.
Sin ti, yo no sabría donde piso,
si en firme piedra o barrizal que abate.
Juntos, mejor oiremos donde late
hervor de Dios por bajo el suelo liso.
¡Hagámoslo brotar con el permiso
de la Altura! ¡Que nadie lo arrebate!
Nuestra Señora, fuente de Alegría,
cobije a los que lleguen con su clara
esperanza sin vana algarabía.
Sepamos darles nuestra mano abierta
y sólo la sonrisa en nuestra cara
¡así caldearán su alma yerta!
(Luego habrá fiesta; sonarán las flautas
de aquella dulce narración de Cristo
con que nos llama a las divinas pautas (*)
¡por el solo hecho de decir existo!)
Alfredo Rubio de Castarlenas
(*) llamando a todos a divinas pautas