Romance endecasílabo

 

Aranguren perdió sin saber cómo

ni qué día, su bien amada Agenda.

¿Con quién huiría? ¿O en algún rincón,

triste y sola estará como Fonseca?

 

Rehacer nombre a nombre los amigos,

sus citas y sus casas ¡qué tarea!

Es cual dejar atrás toda una vida

y empezar con ahínco, otra nueva.

 

Ojalá recuperes los más fieles

y todo lo mejor de tu existencia;

e impensadas pisadas todavía

persigan con tenacidad tus huellas

para que con tu ejemplo y tu palabra

les des más plenitud y más firmeza.

 

¡Quién sabe si tu buen Ángel Custodio

está cribando con amor, tu Agenda!

 

 

Alfredo Rubio de Castarlenas

 

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