FIIT +
Soneto
¡Qué alegría que me has acompañado
a esta tierra verde junto al mar!
¡Todo lo hiciste Tú, cuando al crear
todo también lo habías ya soñado!
Hubiera sido triste haber quedado
ya solo cerca de esta pleamar
mas te tengo conmigo en el altar
del alma en que te vienes transformado.
Y te tengo en mi piscis prisionero,
que es una caracola para oír
rumores de tus mares infinitos.
Que junto a Ti, me siento en la hora cero
y estreno Sol y cielos al vivir
¡con el deseo de alabarte a gritos!
Alfred Rubio de Castarlenas